Diferentes estudios científicos realizados en Inglaterra, EEUU, Austria, Alemania y Finlandia, han demostrado que la práctica de marcha nórdica:
- Ayuda a reducir sobrepeso
- Reduce la presión arterial
- Aumenta la resistencia del cuerpo y los músculos.
- Mejora nuestra actividad cerebral.
La práctica diaria tiene efectos posivos en osteoporósis, diabétes tipo 2 y la artrósis.
El Cooper Institute(EEUU) publicó en 2002, los resultados de un estudio comparativo del caminar normal y la marcha nordica.